¿El desgaste del Muro de los Lamentos? Una nueva investigación llevada a cabo por la UHJ
¿Desgaste del Muro de los Lamentos? Una nueva investigación llevada a cabo en la UHJ podría orientar el desarrollo de nuevas técnicas de conservación de estructuras debilitadas.
Los visitantes del Muro de los Lamentos en Jerusalem pueden percatarse del desgaste que presentan algunas de sus piedras. Esta es una buena noticia para la gente que coloca las notas de oración en las grietas y hendiduras de la pared, pero presenta un problema para los ingenieros preocupados por la estabilidad de la estructura.
Parte de la pared occidental muestra bloques altamente erosionados junto a piedras bien conservadas.
El Muro Occidental es un remanente de la antigua muralla que rodeaba el patio del templo judío en Jerusalem, y se encuentra ubicado en la ciudad vieja de Jerusalem, a los pies del Monte del Templo.
Para calcular la erosión en los diferentes tipos de piedra caliza que conforman el Muro Occidental, investigadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén utilizaron un escáner láser para crear un modelo computacional tridimensional exacto. Los investigadores son el Dr. Simon Emmanuel, profesor titular de la UHJ y la estudiante de doctorado Yael Levenson, del Instituto de Ciencias de la Tierra de la Universidad Hebrea.
Como informaron estos investigadores en un artículo publicado en la revista Geology, las piedras del Muro de los Lamentos compuestas de cristales relativamente grandes han resistido el paso del tiempo, por lo que casi no presentan cambios en los 2000 años desde que fueron colocadas. Por el contrario, la piedra caliza formada por cristales muy pequeños se erosionó mucho más rápidamente.
En algunos casos, los bloques de piedra caliza de grano fino se erosionaron hasta 100 veces más rápido que la tasa promedio estimada para los bloques de piedra caliza de grano grueso. En algunos lugares del muro, estas piedras han retrocedido decenas de centímetros, lo que podría debilitar la estructura en general.
Para entender lo que hace que los dos tipos de roca se comporten de manera diferente, los investigadores recolectaron muestras de antiguas canteras que se cree que suministraron las piedras para la construcción del Segundo Templo. Utilizando un potente microscopio de fuerza atómica, los investigadores pudieron observar cómo las rocas se desintegraron cuando entraron en contacto con el agua. Durante los experimentos con rocas compuestas de pequeños cristales, partículas diminutas se separaron rápidamente de la superficie de la roca. Estos experimentos simulan la forma en la que el agua de lluvia interactúa con la piedra caliza en la naturaleza.
Observado por primera vez en el laboratorio del Dr. Emmanuel, este proceso de erosión acelerada puede explicar por qué algunas rocas se han degradado más que otras. Los hallazgos podrían tener implicaciones importantes para la conservación.
Según el Dr. Emmanuel, “Entender los procesos de erosión puede ayudar en el desarrollo de técnicas de conservación eficaces. Como por ejemplo, la creación de materiales que unan lo cristales diminutos en la roca, de manera que retarden la tasa de erosión de las mismas . Técnicas avanzadas de ingeniería de este tipo deben ayudar en los esfuerzos para proteger, no solo, el Muro de los Lamentos sino otros sitios del patrimonio cultural de Israel y de todo el mundo “.