24ª Escuela sobre Teoría Económica del Instituto de Estudios Avanzados de la UHJ

Sin lugar a dudas mis expectativas sobre el nivel de los profesores que impartieron el seminario y de los participantes asistentes fueron superadas durante mi estancia en Israel. A lo largo del desarrollo del seminario se pudo ver el trabajo de los organizadores (Erick Maskin y Eyal Winter) al programar la secuencia y el contenido de los materiales que presentaron los 10 expositores, de tal manera que los diferentes ponentes revisaron los alcances y los últimos retos que enfrenta la economía conductual en el desarrollo de la investigación económica.

La primera presentación corrió a cargo de Erick Maskin quién se preocupó de impartir una sesión “base” sobre la que se desarrolló el resto del seminario. Este material también permitió refrescar algunas cuestiones técnicas. Día con día la calidad del seminario fue aumentando tanto en la presentación del material teórico como empírico sobre los últimos avances en la Economía conductual y me hicieron reflexionar sistemáticamente sobre mi agenda de investigación. Personalmente, las presentaciones de Itzchak Gilboa (Universidad Hebrea en Tel Aviv) y David Leibson (Universidad de Harvad) serán las que más huella dejarán en mi labor como investigadora docente. También la presentación de Daniel Kahneman, premio Nobel de la Universidad de Princeton, fue extraordinaria.

Con base en la revisión de la literatura de la economía conductual presentada en el seminario, observo que hay conjunto mucho más amplio de posibles explicaciones para las diferencias de género presentes en el mercado laboral. La educación, la experiencia y la discriminación han sido consideradas como principales determinantes de la entrada al mercado laboral. Sin embargo, la falta de mujeres en la banca de inversión hace repensar a los economistas laborales si será que estos puestos pueden no ser particularmente atractivos para este género debido a la feroz competencia que existe entre los banqueros, o tal vez por la fuerte dependencia de los pagos de incentivos en esta profesión, o simplemente porque las mujeres no consideran tener éxito como algo tan crucial como lo es para los hombres.

Estas nuevas perspectivas sobre género reflejan la creciente influencia de la psicología y la economía conductual en la investigación económica. En muchos casos proporcionan micro-fundamentos del por qué las mujeres pueden elegir diferentes caminos educativos que los hombres, o por qué no pueden mantenerse comprometidas con su carrera, aunque se encuentren mejor educadas que los hombres. Una pregunta razonable que surge es si la identidad de género genera características psicológicas que expliquen atributos tales como las actitudes hacia el riesgo, la competencia y la negociación, o el altruismo entre géneros, elementos que influencian la participación en la fuerza laboral.

La relevancia de asistir al seminario de la Universidad Hebrea en Jerusalén es muy alta pues impactó significativamente mi persona, mi profesión y mi visión de la comunidad judía mexicana. En el plano personal es una gran satisfacción haber sido seleccionada entre un grupo de investigadores de alto nivel nacional, y obtener así la beca “Roberto González Barrera” del Grupo Financiero Banorte. Este financiamiento y la gestión de la Asociación de Amigos Mexicanos de la Universidad Hebrea en Jerusalén hicieron posible mi presencia en el seminario.

A nivel profesional mi participación en este seminario inició mi reflexión sobre los diferentes factores que contribuyen a explicar las decisiones laborales de los individuos, y obtuve retroalimentación con algunos de los presentadores sobre el planteamiento y los métodos experimentales que he bosquejado a la fecha en mi investigación.

Gracias a mi estancia en Israel tuve la oportunidad de asistir a la Junta de Gobernadores de la Universidad Hebrea de Jerusalén y presenciar la ceremonia en la que el Doctor Ernesto Zedillo recibió el Doctorado Honoris Causa por parte de la universidad. Posterior a esta ceremonia, la Asociación de Amigos Mexicanos de la Universidad Hebrea en Jerusalén organizó un evento en el que tuve la fortuna de congratular personalmente al Doctor Zedillo, y de conversar con destacados miembros de la comunidad judía en México como el Lic. Oscar Gorodzinsky Freiman, orgulloso egresado de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Anáhuac México Norte, mi actual institución de adscripción.

Específicamente, considero que mi experiencia en la Universidad Hebrea de Jerusalén será muy benéfica para México pues actualmente cuento con fondos públicos del CONACYT para financiar mi investigación sobre el mercado laboral, y sin duda la asistencia a las diversas presentaciones me invita a ahondar a fondo en los diferentes atributos psicológicos que están impactando las diferencias ocupacionales por género en el mercado laboral mexicano. Espero que el Grupo Financiero Banorte y la Asociación de Amigos Mexicanos de la Universidad Hebrea en Jerusalén continúen trabajando conjuntamente para hacer posible que más mexicanos tengan la oportunidad de asistir a este seminario organizado por la Universidad Hebrea en Jerusalén anualmente.