¿Revolucionario reciclaje? Una nueva tecnología gira alrededor de la basura diaria.
Ocho toneladas de basura se amontonan en la entrada de una pequeña fábrica en un kibutz arbolado: comida podrida mezclada con bolsas de plástico, papel sucio, botellas y contenedores desechados, incluso juguetes rotos. Pero nada se dirige a un tiradero de basura. En cambio, lo que sigue es un proceso que podría revolucionar el reciclaje.
Fuente: www.washingtonpost.com
En cuestión de horas, se clasificará, triturará, troceará, limpiará y calentará en una especie de caramelo de basura, luego se resucitará como pequeños gránulos de pseudoplástico que se pueden convertir en artículos cotidianos como bandejas y cajas de embalaje.
“La magia que estamos haciendo es que nos estamos llevando todo: los huesos de pollo, las cáscaras de plátano”, dice Jack “Tato” Bigio, director ejecutivo de UBQ Materials. “Tomamos este desperdicio y lo convertimos”.
Tal reciclaje es completamente necesario para un mundo que busca soluciones a los desafíos ambientales causados por los 2 mil millones de toneladas de desechos generados anualmente.
Se dice que ha tenido éxito donde otros han fallado, creando una tecnología radical que transforma la basura en materias primas para los fabricantes de plásticos y, al final, les genera ganancias.
Al desviar los desperdicios domésticos destinados a un entierro a largo plazo, el proceso ayudará a reducir la producción de un poderoso gas de efecto invernadero en los vertederos y creará una nueva vida para el plástico difícil de reciclar. El ciclo ejemplifica una “economía circular”, en la que los desechos se convierten en algo útil.
“Si queremos avanzar hacia un futuro más sostenible, no solo necesitamos nuevas tecnologías, sino nuevos modelos de negocios”, dijo Antonis Mavropoulos, un ingeniero químico griego que es presidente de la Asociación Internacional de Residuos Sólidos
¿Cuál es la “magia” detrás de esto? El experto en biotecnología Oded Shoseyov, profesor de la Universidad Hebrea que ha consultado para UBQ, dice que derretir plásticos y desechos crea una sustancia homogénea fortalecida por fibras en los ingredientes orgánicos.